El antiguo vivero forestal de la Alfaguara ha sido recuperado recientemente como Arboretum e itinerario botánico y concentra una buena parte de la rica biodiversidad que podemos encontrar en la sierra de Huétor.
Compuesto por coníferas de hoja persistente y árboles caducifolios, las estrellas del Arboretum son los pinsapos y varios cedros centenarios; estos últimos impresionarán al visitante por su enorme porte, con más de 35 metros de altura y casi 3 metros de diámetro. La presencia de árboles de hoja caduca como el cerezo, el majuelo, el olmo, el arce o el chopo entre otros muchos, hace que este sendero sea especialmente atractivo en otoño, cuando las hojas de estos árboles adquieren unas tonalidades espectaculares. Y por si no fuese suficiente, el Arboretum de la Alfaguara es un auténtico refugio para aves como el mirlo, el verderón, el piquituerto o el reyezuelo, que encuentran en este paraje un refugio ideal.