Al parecer, la alquería de Alfacar disponía de dos recintos amurallados, de los que poco queda. El recinto conocido como el alcázar, debió ocupar la superficie comprendida entre la actual calle de acceso al pueblo, la Plaza de la Iglesia, las calles Cárcel y Zancanal y el borde del corte de esta meseta al Sur y al Este. El otro recinto de la ciudad amurallada, más amplio que el anterior, comprendería lo que es el resto del casco antiguo, desde el actual extremo Suroeste, la plaza de la iglesia hasta la zona Noreste del baño árabe.
Del antiguo alcázar, se encontraron restos de un muro en la calle de entrada a la Plaza de la Iglesia. Además, en un huerto situado al final de la calle Zancanal, se ha conservado una torre de sillería de piedra franca con pequeños trozos de muros saliendo de ella.
El Arco de Somera, formaba parte del recinto amurallado del poblamiento, en el extremo de la calle Cuba. El arco podría ser una de las puertas de acceso a la ciudad. Está formada por una bóveda de cañón rebajado de sillería.
Actualmente es un Bien de Interés Cultural.